lunes, 25 de abril de 2011

De Hadas y Brujas

El Bien y el Mal… La lucha infinita entre ambas fuerzas representada por la lucha entre hadas y brujas… Pero… ¿De dónde vienen estos seres fantásticos? Nosotros los conocemos gracias a los textos folklóricos, creados y modificados por el pueblo y el tiempo. Probablemente, el origen de su aparición en los cuentos e historias viene de las historias paganas, de las leyendas y de las múltiples historias que, a través del tiempo, se han convertido en lo que hoy conocemos como cuentos.



¿En qué se diferencian unas y otras? Las Hadas son buenas y nacen hadas, recordemos la historia de Lilith; y las brujas son malas y se hacen brujas, no nacen así, sino que lo deciden y aprenden las artes oscuras del Mal Absoluto: el Diablo. Esta es la diferencia fundamental entre ambas.





¿Y en qué se parecen? Pues en que ambas son mágicas y prácticamente todas, -tanto hadas como brujas-, son mujeres… Si recordamos lo que escribí sobre el machismo en el post anterior nos daremos cuenta de que tampoco en estos casos, -de hadas y brujas-, es correcto el tópico “machista” a los cuentos folklóricos.

Los roles que juega la mujer en los cuentos son tres:

* Princesa: es la adolescente, la protagonista, la que ha de llegar a la vida adulta… en la historia, -como decíamos en la entrada anterior-, lo que se cuenta es su viaje iniciático. Se caracteriza por la juventud y la belleza.




* Madre: es la mujer madura, tiene un papel importante, la reina, la que asegura la supervivencia de la raza humana… en muchas ocasiones desaparece porque ha cumplido su función.

* Madrastra: aparece tras la desaparición o muerte de la madre, refleja el odio hacia la princesa porque le recuerda que su tiempo ha pasado, que ya no tiene la belleza de la princesa… la imagen de ésta le recuerda el dolor del paso del tiempo y de la impotencia de no poder hacer nada.




A estos podemos añadir:

- Las Hadas, por su parte, no son uno de los roles típicos de la mujer, sin embargo, al ser joven y bella podríamos relacionarla con la princesa.


- Y las brujas, que se acercarían más al papel de madrastra.



Sin embargo, estas dos últimas no son las protagonistas/antagonistas de la historia como tal sino que ayudan –en el caso de las hadas-, y dificultan –en el de las brujas- el viaje iniciático de la joven protagonista de la historia.

En general estos cuentos les encantan a los niños, sobre todo por los personajes fantásticos que aparecen. Sin embargo, como futuras profesoras de Educación Infantil, debemos recordar que estos cuentos no están dirigidos específicamente a los niños, sino, más bien, a un público adolescente. Lo que podemos hacer, por tanto, es adaptar estos cuentos o historias a los intereses y al nivel madurativo y psicológico de nuestros alumnos, teniendo en cuenta que habrá de existir un personaje con el que se sientan identificados y que tanto el tiempo, como los espacios, como las situaciones deben ser encuadradas en el contexto de los más pequeños para poder ser entendidas por éstos.

Día del libro.

Literatura folklórica.

En el bloque que estrenamos, vamos a tratar la literatura (infantil) folklórica. En contraposición con la de autor, esta literatura no tiene sólo un autor. Me explico, estos textos han ido pasando de boca en boca, de generación en generación y, por supuesto, no se mantienen idénticos a cómo se contaron por primera vez. Es por esto que no tiene un autor concreto, todas las personas que lo han contado alguna vez habrán añadido, quitado, olvidado o cambiado partes del mismo y así ha ido tomando forma hasta nuestros días, hasta que nosotros lo hemos escuchado... Tan fácil es que vayan cambiando estos textos que, ni siquiera en clase, nos poníamos de acuerdo sobre como eran algunas canciones, cuentos, frases, etc...

Se podría decir por tanto que los autores son muchísimos incluyendo, entre ellos, al tiempo. Al tiempo que ha pasado desde que esa historia se contó hasta que la hemos escuchado. El que no tengan un autor concreto puede resultar una ventaja ya que nos da la opción, la libertad, de adaptar la historia.

Los textos folclóricos o los textos de tradición cultural, son textos del pueblo porque los contaban los que no sabían escribir, el pueblo llano, para transmitirlos y que no se perdiesen, ara que pasasen de generación en generación y llegasen hasta nosotros, para contar las historias que sabían, para que las noticias se expandiesen... es por tanto que no podemos hablar nunca de la VERSIÓN ORIGINAL de un cuento folklórico, ya que ésta ya no existe, se ha perdido coon el tiempo. En este caso se habla de la versiónd e Perrault, de los Hermanos Grimm, etc... de quienes recogen/recopilan estos cuentos o historias, cuyo único objetivo es que la historia no se pierda.

Los orígenes de los cuentos folklóricos son diversos:

a) Si seguimos lo que dicen los folkloristas, muchos fueron hechos reales. Un ejemplo sería "Caperucita Roja" porque, reduciéndolo a un posible realismo, no es más que la historia de una niña deborada por un lobo.

b) Otro de los orígenes es lo religioso. Muchos derivan de mitos, que han perdido su carácter religioso, "eliminando" las figuras de los dioses por seres fantásticos (hadas, brujas, ogros ...)

c) Otros cuentos son inventados para enseñar a los niños y, sobre todo, a los jóvenes los peligros de la vida, de que se deben guardar, etc... y se han ido modificando a lo largo de los siglos.

d) Por último, otro origen de estos textos serían las historias paganas.

Otra característica de la literatura folklórica sería que presenta multitud de variantes. Y esto... ¿Qué quiere decir? Pues fácil: simplemente que no todos conocemos la historia de igual manera, hay elementos de la historia que unos conocen y otros no, o frases que cambian... Y si esto pasa, como he dicho antes, en un pequeño grupod e 14 personas, todo chicas de entre 19 y 26 años...¿Qué no pasará de unos países a otros? Y, teniendo en cuenta los orígenes, sobre todo el primero (historias verídicas) y el tercero (enseñar de los peligros de la vida), hemos de ser conscientes de que todo esto se encuadra en un contexto, y en un contexto que no tiene nada que ver en un país o en otro. Un ejemplo para ilustrar lo que acabo de decir sería pensar en el malo de los cuentos europeos, que es, generalmente, el lobo del bosque; y el malo de los cuentos sudamericanos, que es, generalmente, el chacal y vive en la selva... Este cambio de "malos" es, simplemente, para acercar la historia al espacio del niño (algo necesario como también hemos estudiado en los cuentos de autor...).

Si lo que buscamos son características comunes a los textos folklóricos,tenemos que:

* en la mayor parte de las historias se reflejan no sólo las costumbres del pueblo, sino también los miedos, deseos o sueños del mismo.

* La finalidad primordial de estos textos es ENTRETENER. Pero, no nos equivoquemos, aunque ahora los utilicemos para los niños, los cuentos folklóricos NO SON CUENTOS INFANTILES, nunca lo han sido, eran, simplemente, historias que se llamaban (también) textos del hogar, entendiéndose hogar como la zona de la casa donde estaba el calor y donde se reunía la familia cuando ya era de noche. Por esto también se conocía a estos cuentos como "Cuentos al calor de la lumbre". Allí, para pasar el rato, se contaban historias, las contaba cualquier miembro de la familia, aunque, por edad, los que más historias sabían eran los abuelos y generalmente eran LAS ABUELAS las que más historias contaban. Sus cuentos estaban dirigidos a entretener y divertir a todos (no estaban centrados en los niños). Aunque no fuesen infantiles, se contaban a los niños por la facilidad de que ellos lo entendiesen, solían tratarse de historia sencillas, con personajes planos y, además, cargados de didactismo con el paso de los años. Esto, unido a que la Literatura Infantil no surge hasta los 90, hizo que se utilizasen, hasta hace pocos años, los cuentos folklóricos para los niños mediante adaptaciones.

Como hemos dicho, no son cuentos infantiles, entonces... ¿A quién iban dirigidas estas historias? Bueno, pues si hubiera que buscar un receptor implícito para esta literatura, serían los ADOLESCENTES, ya que casi todos los protagonistas son adolescentes que tienen que pasar a la vida adulta. Son por tanto historias que cuentan "viajes iniciáticos".

Algunos símbolos que encontramos en los cuentos son:

- LA FAMILIA: que simboliza protección.
- EL FINAL EN BODA: la llegada a la vida adulta, la posibilidad de crear un nuevo núcleo familiar...

Por último y teniendo en cuenta las "acusaciones" de que los cuentos folklóricos son machistas, hemos de romper una lanza por ellos y decir que no lo son para nada. Cuando aparece una mujer arreglando la casa, no es más que un reflejo de la época... Pero no hay ninguna intencionalidad machista en las historias...

¿O es que acaso Gretel no es la
"lista de la familia", la que
tiene la idea de que su hermano
enseñe un hueso en vez de el dedo?




¿Y qué pasa con Cenicienta que
se revela, pasa de su madrastra,
aparece SOLA en un baile (¡y en
esa época!), elige ella al príncipe
y se va para que la busque? Si esto
es machismo...


Y, ¡cómo no!, Blancanieves... Este

sí que es machista, que limpia la casa
y cocina para los enanos... Pero...
¡Algo tendra que dar a los enanos a
cambio de vivir alli! Sinceramente...
lo de limpiar y cocinar me parece la
opción menos machista...


En definitiva.... ¿Qué cuento es machista? Yo no recuerdo ninguno y, además, si nos basamos en la teoría, me parece a mí que pocos habrá... ¿No hemos dicho que las que generalmente contaban las historias eran las ABUELAS? ¿Y no hemos dicho también que los cuentos reflejaban los DESEOS Y SUEÑOS de la gente del pueblo? Pues, si juntamos las dos... ¡no me sale como resultado un cuento machista!

Taller de prosa y taller de verso.

Para la creación literaria, -tanto para como con los niños-, hemos trabajado en clase con dos talleres: el taller de prosa y el de verso.

En el primero, la idea es crear cuentos con (o para) los niños. En el segundo caso, en vez de narraciones, serán poesías. Esto puede parecer muy complicado, -¡yo estaba segura de ello!-, sin embargo, gracias a los tiempos que corren ya no es necesario contar sílabas ni comerte la cabeza hasta que consigues una rima... Así que, ¡genial!, sin estas tediosas obligaciones y gracias a la espontaneidad e imaginación, sobre todo de los niños, será mucho más sencillo hacer libros de poesía para nuestra clase.

TALLER DE PROSA

Tenemos distintas técnicas para las creaciones (con y para los niños) en prosa:

* El dibujo: sólo hay que mirar una ilustración, un mural, un dibujo… observar todo lo que aparece representado: qué hacen los personajes, dónde están, quiénes pueden ser… e inventar un cuento.

* Secuencias: un poquito más difícil: una historia en imágenes secuenciadas debe servir de base para la historia. Se trata de “leerla” desde la iconografía y convertirla en texto

* Historias mudas: se escogen una serie de ilustraciones que no tengan nada que ver. Se ordenan y se inventa una historia que las reúna todas.

* Binomio fantástico (Gianni Rodari): a partir de dos palabras sin relación aparente (ej. luz y cartera) se inventa una historia. Pero ¡ojo, hay que echarle mucha imaginación!

* Hipótesis absurda (Gianni Rodari): ¿Qué ocurriría si las plantas, una mañana, comenzasen a hablar? Inventad nuevas hipótesis absurdas y haced la historia correspondiente:
(Esta mañana ha ocurrido algo muy extraño: las plantas hablaban. Los geranios de las ventanas cotilleaban sobre lo poco que los riega mamá y el poto del salón gritaba y gritaba que estaba harto de la televisión......)

* Minicuentos: ¿Has visto los cuentos de Calleja? Pues corta un folio en todas las mitades posibles hasta hacerlo del mismo tamaño y escribe, con letra de chuleta, un cuento pequeñito. Puedes ilustrarlo, si quieres; a los niños les encantarán.

* La liberación de mujer: en la mayor parte de los cuentos populares, el papel de la mujer es siempre pasivo y ajustado a la visión tradicional (esperar al “príncipe” que la salve o se case con ella). Desde principios de siglo, la teoría literaria feminista ha propuesto revisar nuestros clásicos y hacer de las protagonistas, personajes activos en la historia. ¿Lo intentamos con uno cualquiera? Puede ser un cuento folclórico o una novela, o, incluso una película.

* Cuentos múltiples por núcleos: dividid, cada uno, un folio colocado en vertical, en seis columnas iguales (bien medidas) y horizontales. Cortadlas dejando un margen de 5 centímetros a la izquierda. Escribid un cuento breve sobre el siguiente esquema:

1ª columna: Érase
2ª columna: Que
3ª columna: Cuando
4ª columna: Entonces
5ª columna: Se
6ª columna: Y

Juntad todos los cuentos y unidlos por el margen de la izquierda. Podréis leer múltiples cuentos si abrís los seis por lugares diferentes que correspondan a cuentos distintos.

* Estructura de un cuento en otro espacio o tiempo:¿Qué tal Alicia en el País de los Romanos? o ¿El Flautista de Hamelin en la Guerra Civil Española? Inventad más posibilidades y escribid el final de los cuentos.

* Y ¿Después del cuento?: estamos acostumbrados a que todos vivan felices y coman perdices pero ¿Qué pasó con los 7 enanitos después de la "resurrección" de Blancanieves? ¿Tendrían mucho hijos la princesita y el príncipe rana? Inventad más posibilidades y escribid el final de los cuentos.

* Palabras nuevas en un cuento popular: ¿Qué pasaría con el cuento de Caperucita Roja si tuviésemos que meter en él las palabras "marketing", "audiovisuales" y "aeropuerto"? ¿Y con el cuento de los 7 cabritillos si en él apareciesen las "nuevas tecnologías", el "constructivismo" y un "cohete espacial"? Inventad más posibilidades y escribid los cuentos.

* Cuentos al revés: los buenos pasan a ser malos y los malos buenos. Los feos, guapos y los guapos, feos. Los listos, tontos y los tontos, listos. ¿Cómo sería la historia de Negrocarbón y los 7 gigantes? Inventad más posibilidades y escribid los cuentos.

* Apellidos: no se trata de investigar en la genealogía familiar. Se trata simplemente de inventar el escudo de nuestro apellido, dibujarlo e inventar la historia que justifique sus elementos. ¡Puede remontarse a la Edad Media! ¡Y hasta a la Prehistoria!

* La bandera: Arturo de Bretaña fundó Camelot, su país ideal: inventó su bandera, creó sus leyes y vivió su historia... Se trata de hacer lo mismo, pero sobre el papel, ¡no sobre la clase ni sobre los compañeros!

* Biografías a partir del nombre: ¿Quién fue Vicente Nario? y ¿Leo Pardo? Y ¿María No? Y ¿L. Fante? Y ¿Robin Hood Crusoe? Y ¿Cállate Kid?... Inventad más posibilidades y escribid los cuentos.

* Historias en primera persona: ¿Qué contarías si fueras un objeto de la vida cotidiana como una cafetera, un huevo, un bolígrafo o un tomate? Inventad más posibilidades y escribid el cuento.

* El título metafórico: escoged un verso de un poeta surrealista, un verso extraño, metafórico y descontextualizado. A partir de él escribid una historia. ¿Qué tal "La tarde loca de higueras" o "En el presidio de una almendra esclava" o "En el insomnio de las cañerías olvidadas"?

TALLER DE VERSO

Como comentaba en mi entrada anterior, para gran alivio -no sé si de otros pero, desde luego, sí mío-, he hecho un maravilloso descubrimiento en la asignatura de Literatura Infantil: ¡La poesía ya no tiene que rimar! Ya se podían haber enterado las monjas de mi cole, cuando llegaba el mes de mayo y nos obligaban a todos a escribir una poesía a la Virgen... ahí sudábamos tinta todos... ¡hasta nuestros padres! Aquello sí que era implicar a la familia en la tarea que nos mandaban en el cole... En fin...como decía, ya no tiene que rimar, sino que se fundamenta en una estructura rítmica y en el uso de la función poética del lenguaje, que viene dado por la utilización de figuras estilísticas o literarias. Por lo tanto, de lo que se trata es de crear poemas utilizando diversas figuras literarias.

Tenemos distintas formas de hacerlo:

* En primer lugar, los pareados. Estos sí que tienen que rimar, pero no hay problema porque los hacen los niños... y es algo que, además, les divierte un montón. Pero, por si nos toca, recordar que es mejor buscar rimas asonantes. Algún ejemplo para esta actividad, que además encantará a los pequeños es hacer rimas con los nombres de los alumnos que tenemos e, incluso, hacer un libro con la foto de cada uno y la rima de su nombre... ¡Seguro que les encanta!

* La figura literaria que vemos (y utilizamos a diario es la comparación que consiste en comparar (valga la redundancia) objetos por su color, su forma, su utilidad, etc. Sirva como ejemplo el poema al sol elaborado en clase con comparaciones:

El sol es como un girasol.
El sol es como un helado de limón.
El sol es como un huevo frito.
El sol es como un mosquito.
El sol es como una pelota.
El sol es como una hoguera.
El sol es como un queso.
El sol es como un plato.
El sol es como el turrón.
Así es el SOL.


La idea es que, una vez elaborado, los niños se lo aprendan. También, y sobre todo si los niños son más pequeños, podemos elaborarlo en forma de pictograma, así:

El













es como un










es como un










es como un









es como un










es como una










es como una










es como un










es como un










es como el









Así es el










* Otra figura literaria que podemos utilizar son las metáforas que consisten en identificar un objeto con otro. Son tan fáciles de realizar como quitar el "COMO" a las comparaciones. En este caso nuestro poema sobre el sol quedaría de la siguiente manera:

El sol es un girasol.
El sol es un helado de limón.
El sol es un huevo frito.
El sol es un mosquito.
El sol es una pelota.
El sol es una hoguera.
El sol es un queso.
El sol es un plato.
El sol es el turrón.
Así es el SOL.


* Otra forma que tenemos de cambiar un poema es preguntando, ¿qué es? , convirtiéndose en una adivinanza. Sería así:

¿Qué es...
...como un girasol,
como un helado de limón,
como un huevo frito,
como un mosquito,
como una pelota,
como una hoguera,
como un queso,
como un plato
y como el turrón?

EL SOL.

De este tipo de poema podemos hacer millones... por ejemplo un buen regalo para el día de la madre sería uno cuyo título sea "Mi mamá" y sea mi mamá es como... y lo que se les ocurra a los niños; también es un posible regalo para los papás ("Mi papá"); la Navidad (es como...); etc...

* Otra opción son los poemas de preguntas y respuestas. Por ejemplo, en clase surgió el siguiente:

Hoy hace sol,
¿Por qué hace sol?
porque ya es primavera.
¿Por qué es primavera?
porque ya hay flores.
¿Por qué hay flores?
Porque hoy hace sol.

Al final decidimos titularlo: "La primavera".

* Otro ejemplo de actividad que trabajamos en clase fue la modalidad del poema encadenado. El que resultó fue el siguiente:

Me gusta el chocolate
El chocolate es dulce
El dulce pica los dientes
Los dientes se los lleva el ratoncito Pérez
El ratoncito Pérez es pequeñito
Pequeñito también es mi hermano
Mi hermano come chocolate.


* Para terminar esta clase, hicimos un último tipo de poema: el acróstico. Éste consiste en utilizar cada una de las letras que forman un nombre como inicial de una palabra (generalmente bonita...) que lo describa. El ejemplo con el nombre de la profe fue:

Impresionante
Risueña
Universitaria
Natural
Extrovertida

Después cada una se lo escribimos a una compañera:

El mío para Meri fue:

Mega-cuqui
Entusiasta
Romántica
Imaginativa

Y Anita me escribió:

Majísima
Amigable
Romántica
Increíble
Auténtica

¡Que monas somos todas! jeje

La verdad es que, la del taller de verso, fue una clase que me encantó y además me pareció muy útil por dos motivos: el primero es que es una lluvia de ideas espectacular para crear libros y más libros para nuestras futuras aulas, y, el segundo, es que me parece una forma divertidísima de acercar a los niños a la poesía. Todas las ideas que surgieron y las actividades que hicimos me parecen estupendas como guía de lo que podemos hacer en el futuro.

miércoles, 20 de abril de 2011

Creación literaria con y para niños.

Todo aula de Infantil ha de tener su propia biblioteca. El problema viene a la hora de conseguir cuentos para que la biblioteca sea una BUENA biblioteca de aula.

Para este fin, y como adelanto a nuestro proyecto de biblioteca de aula, hay diferentes formas de conseguir los libros suficientes: por una parte, el centro siempre destinará algo (aunque sea poco) de su presupuesto para comprar libros y cuentos para los niños, como ese dinero es escaso, es necesario utilizarlo bien, y de ahí la importancia de elegir bien los libros infantiles. A este menester, ya hemos dedicado una entrada anterior.

Otra forma de conseguir libros es, sencillamente, pedirlos a los padres de nuestros alumnos -o, mejor, ex-alumnos-. En las reuniones de cada año comentaremos a los padres el gran favor que nos harán si, el día de mañana, nos donan los libros y cuentos de cuando sus hijos eran pequeños. Esta es una buena forma de conseguir material de forma gratuita.

Por último, tenemos otra opción para ampliar nuestra biblioteca de aula:
CREAR NOSOTROS MISMOS LOS CUENTOS. Los libros podemos hacerlos nosotros para contarlos luego en clase y que los niños los utilicen como un material o recurso más, o podemos pedirles ayuda para hacer los cuentos. De este modo, "mataremos dos pájaros de un tiro": por una parte ampliaremos nuestra biblioteca de aula y, por otra, fomentaremos la lectura y el uso de esos cuentos por parte de los niños porque sienten que es algo suyo.

Estas creaciones literarias, como hemos comentado, pueden ser hechas CON los niños o PARA los niños.

En el primer caso son muchas las formas con las que podemos llevar a cabo nuestro objetivo: un cuento nuevo con los niños, lo que sumará un gran valor a dicho cuento. Entre las principales actividades que nos servirían encontramos:

a) Podemos iniciar una historia y hacer una cadena de forma que cada niño continue la historia. Así todos formarán parte de la invención del cuento y, además, les servirá para dejar a un lado el egocentrismo tan propio de estas edades... ¿Que por qué? Pues es sencillo, TODOS tienen que participar, en el cuento caben las ideas y las aportaciones de todos y ninguno hará más que otro. Para ello podemos poner un máximo, por ejemplo, una hoja cada uno en la que escribir una frase y hacer un dibujo de la misma.
Si vemos que los niños no se lanzan a inventar la historia, podremos ayudarles mediante preguntas.
Por último, en este tipo de creación grupal, la profesora, probablemente, tendrá que recordar contínuamente el hilo de la historia y los personajes creados, ya que serán muchísimos debido a la gran imaginación de los niños y a la ilusión que les hace que "su historia", "su cuento" se escuche.

b) Otra opción es lo que se conoce como "libro viajero". Esta es una técnica que consiste en que cada niño se lleve el cuento y se encargue de ilustrar y/o narrar cada una de sus páginas. Este método se utiliza sobre todo de cara al fin de semana y, además, es una buena técnica para implicar a las familias en la escuela, en el trabajo de sus hijos y en el de sus compañeros. Además, al niño le gustará que sus padres le ayuden con su libro y, cuando esté finalizado, se sentirá -junto a su familia- una parte más del todo que conforma la clase. En el caso de los libros viajeros, suele reservarse la última página para la profesora o para hacerla entre todos.
Una buena idea es, reproducir el libro (uno para cada alumno), anotando quien hizo cada página, y regalárselo a cada niño a final de curso.

c) "Técnica Enamorados". En este caso, el cuento se hace CON los niños, pero sin que ellos lo sepan, por expresarlo de alguna manera. La idea es estar pendiente de las conversaciones, las opiniones y las ideas que tienen los niños sobre un tema en concreto, para después utilizarlas como diálogo o hilo conductor de la narración. Una vez acabado el cuento, se les puede hacer partícipes a los niños pidiéndoles que ilustren el cuento dibujando sus ideas sobre el tema tratado.
Esta forma de crear un cuento es, para mí, de las más interesantes porque, cuando les contemos el cuento a los niños -o ellos mismos lo lean-, se sentirán 100% identificados porque los que hablan en el cuento son ellos mismos. Además, muchas veces si las ideas o explicaciones son de un niño, les llega mucho mejor a los demás... me refiero a que, es muy probable que ni nosotros pudieramos expresarlo mejor y más cercano... Me parece, simplemente, genial.

d) Por último, y centrándonos ahora en el verso, podemos hacer un cuento de "poesías por versos". En este tipo de creaciones, los niños vuelven a serlos protagonistas: cada alumno inventará un verso o pareado y la poesía se hará uniendo todos los versos de la clase. Como en todos los anteriores, lo mejor para ilustrarlo, es pedir a los niños que lo hagan ellos mismos.


En el segundo caso, hay que tener en cuenta ciertos requisitos:

* Receptor: hay que tener en cuenta los niños que conforman el grupo.

* El vocabulario ha de ser adecuado a la edad de los niños, al vocabulario que conocen y utilizan ellos. Además, es conveniente que las frases sean simples y cortas.

* Temas: han de ser significativos, a la par que apropiados al momento evolutivo. Es importante también que nazcan de la motivación intrínseca de los niños (interés natural de los mismos sobre un tema concreto).

* El espacio y el tiempo han de ser reconocibles para los niños, para que puedan imaginar el contexto de la historia.

* Valores y contravalores: es necesario que respondan al momento evolutivo de los niños del aula.

* Estructura lineal con nudo acumulativo.

* Emisor, -personaje con el que se identifica el niño-.

* Formato:

-Tamaño: preferiblemente mediano para que los niños puedan manejarlos bien y además se puedan hacer lecturas en grupo y toda la clase pueda ver los dibujos.

-Las páginas habrán de ser gruesas para que lo puedan agarrar bien (durante el primer ciclo). A partir de dos años o dos años y medio utilizan hojas en del grosor de una cartulina y, a ser posible, plastificado para evitar, -o, por lo menos, retrasar-, su deterioro.

-En el caso de la portada, no podemos olvidarnos que la ilustración es lo que hará que los niños se animen a utilizar el cuento.

-La letra tiene que ser grande para evitar que el ojo se relaje y cuando sean mayores, al leer en voz alta, lo hagan lentamente.

-Ilustraciones: no hemos de preocuparnos si el dibujo no es lo nuestro, ya que al ser algo que hacemos para ellos, les encantará de todos modos. Si, aún así, no queremos ser nosotros quienes dibujemos, siempre podemos pedir a los niños que dibujen ellos lo que cuenta el cuento o, como último recurso, acudir a dibujos de internet. Lo que sí es necesario es huir de las imágenes estereotipadas, sin ningún significado.

En definitiva, si nos fijamos, los requisitos a tener en cuenta a la hora de crear un cuento, son los mismos aspectos en los que nos fijábamos en el análisis de un cuento para ver si era adecuado, -o no-, al grupo-aula. Simplemente, siguiendo esos pasos, y con imaginación podemos llenar nuestra biblioteca de aula. Sería bueno, una vez terminados, pasar a analizar el cuento creado para comprobar que responde adecuadamente a los objetivos que nos habíamos marcado.

Ahora...¡A CREAR CUENTOS!

lunes, 18 de abril de 2011

Cómo elegir un buen libro infantil.

Para elegir un buen libro infantil, hay que tener en cuenta ciertos aspectos del mismo. En este sentido, como futuros profesores, hemos de saber valorar si realmente el libro escogido responde a las necesidades, intereses y edades de nuestros alumnos. Para ello, a continuación, tenemos ciertos aspectos que hay que cuidar y estudiar para saber, definitivamente, si nos quedaremos con el cuento o no.

ANÁLISIS LIBRO INFANTIL

1º Receptor: Lo principal es saber a quién va dirigido. Debemos ser expertas en aproximar la edad a quien va dirigido, y no fiarse de las recomendaciones de edad de las editoriales.

2º Etapa evolutiva
Los maestros sabemos de ciertas nociones de psicología de desarrollo de los niños. Por lo tanto, a la hora de elegir un libro para niños, no sólo hay que tener su edad, sino su momento evolutivo-madurativo.

3º Emisor
No se trata de entender el concepto según el proceso de comunicación, sino más bien, pensar quién es el emisor para el niño. El niño tiene claro que el emisor, no es la persona que está contando el cuento o leyendo el cuento. Para el niño, el emisor, es el protagonista del libro que le cuenta una historia. Y esto ocurre, porque el niño lector, se identifica con el niño protagonista. En el caso de que en el libro, no haya un protagonista con quien se identifique, o que no relate un historia, el niño entiende que existe “alguien”, una persona, un “narrador”, que le cuenta los acontecimientos del libro.

4ª Tema
A la hora de elegir un libro para niños, se ha de mirar que le interese de forma natural, no de manera forzada. Y sobretodo, no seguir los gustos ni intereses del adulto.

5º Estructura: Existen dos tipos:
• Estructura lineal básica: La que todos conocemos PLANTEAMIENTO, NUDO, DESENLACE.
• Estructura acumulativa: Se van acumulando los personajes, o hechos, sobre la base lineal. No es obligatorio que haya un final en este tipo de estructura (final abierto) pero se recomienda que tenga, ya que los niños ni les gusta que no haya final, ni conciben que no exista un final cerrado en un cuento.

6º Espacio y Tiempo
Puede haber libros con espacios y tiempos reconocibles para los niños, o puede que sean indefinidos (no se define el tiempo/espacio porque no es relevante. No aporta nada nuevo a la historia).

7º ilustraciones
Para elegir un libro, no debemos guiarnos por si nos gusta o no las ilustraciones (eso es algo muy subjetivo). Debemos mirarlo con unos criterios objetivos:
a) ilustraciones artísticas, expresivas, para transmitir la sensibilidad de la historia, que le aporten algo, y no estereotipadas.
b) Que la secuencia de las ilustraciones permitan seguir la historia.

8º Lenguaje: Mejor cuanto más poético y artístico, pero también teniendo en cuenta el nivel madurativo de los niños (saber si va a entenderlo). No es recomendable sobrecargar de palabras nuevas, pero sí es adecuado, incluir algunas nuevas, pero funcionales (que con esas palabras nuevas se logre ampliar vocabulario, que sirvan para algo. No palabras antiguas en desuso, que no le van a aportar ni servir nada).

9º Valores y contravalores: Tiene que ver con valores positivos y negativos del niño protagonista (actitudes y valores que asimilen y el día de mañana le hagan más feliz o menos). Los niños no entienden el concepto/adjetivo (educado, persistente…), pero sí entienden la acción, la actitud que conlleva el concepto.

10º Conclusión


En base a este análisis, hay ciertos libros que no deberían faltar en un aula de Educación Infantil (2º ciclo):




Adivina cuanto te quiero.



¿A qué sabe la luna?: es de los años 90. Es un clásico de la literatura infantil. El emisor es como una 3ª persona que cuenta la historia, pero la historia les llama tanto la atención que les encanta el cuento, aunque no tengan un personaje con el que el niño se pueda identificar. Ilustraciones geniales, el papel parece rugoso (aunque no lo es) y, por tanto, les invita a tocarlo. Michael Grejniec. Ed. kalandraka.



Enamorados: sale de diálogos y vivencias reales de niños reales en casa o clase. Se puede hablar de cómo tratar a la gente, preguntarles qué es estar enamorado, si se pega a la gente, etc… Rebecca Dautremer. Ed. kokiros



En busca del beso: No tiene un niño con quien se puede identificar, porque el niño q aparece no es el protagonista. Los dibujos les llaman mucho la atención. Aparece el tema del miedo la oscuridad… la nieve, el frío… los lobos. Habla de la complicidad entre padres y niños. Aparecen dragones q es un tema q les gusta y les hace ilusión. Incluye un poco el tema del humor, algo q no es fácil porq los niños no se rien de lo mismo q nosotros. David melling. Ed. Beascoa.



Un culete independiente. Es de los pocos “libros buenos” escrito por un español. Tiene cierto carácter moralizador y didáctico (hay q portarse bien). Es de humor infantil. Se ríen muchísimo con el cuento. Jose Luis Cortés Ed. El barco de vapor.



El topo que quería saber quién se había hecho aquello en su cabeza. Les hace muchísima gracia sobre todo a los de 2º ciclo de infantil. Es de un topo que saca la cabeza y alguien se hace caca en su cabeza y decide investigar quien ha sido. No se va a quedar con la venganza sino que se va a reír porque aparecen cacas. Werner Holzwarth/ Wolf Erlbruch. Ed. Alfaguara



Todos sois mis favoritos: Sam Mc Bratney ilustrado por Anita Jeram. Ed. kókinos



Besos, besos

El nonsense.

El nonsense. El sin sentido, lo extraño –o lo que nos resulta extraño-, lo que no entendemos, lo que no es lógico, el absurdo… esto es lo que nos indica este título…

Después de leerlo he pensado: “¿Y qué pasa si yo ahora afirmo rotundamente que los animales hablan?” Pues probablemente lo que ocurra es que esto se llenase de comentarios de que estoy loca o algo así… o simplemente que quienes lo leyesen ni siquiera comentasen nada, ¿para qué?, si es una tontería lo que pone… Pues resulta que yo he visto animales hablar, lo he visto en cuentos, en películas… Sin embargo, si esa pregunta en vez de un adulto la ve un niño, ¿cambiaría la situación? Probablemente sí. Para ellos todavía no hay una realidad establecida, una realidad que es así porque es así y punto.

De estos temas trata el artículo de Consuelo Armijo, de todo aquello que los adultos “sabemos” y los niños “habrán de aprender”… Y digo que “sabemos” (entre comillas) porque realmente lo CREEMOS. Nos hemos creído lo que nos han contado… Según hemos ido creciendo hemos ido cerrando nuestro campo de “visión”, hemos ido estableciendo tópicos, que nos hemos creído, hemos afianzado y hemos llegado a convertir en verdad única… Es esto lo que ocurre con el ejemplo del cielo que comenta la autora… ¿Quién se atrevería a pintar el cielo de un color que no sea el azul? Pues, casi con total seguridad, nadie que no sea un niño… ¿Y no es cierto que al atardecer el cielo toma colores anaranjados, rosáceos, rojos…? ¿Y justo antes del anochecer es casi violeta, morado…? ¿Y qué pasa de noche, no es negro el cielo? Tomo este ejemplo porque me parece que ilustra el hilo del artículo a la perfección… Sin embargo no es sólo el cielo… Ocurre igual con el mar, o con los árboles (siempre dibujamos frondosas copas verdes… ¿No puede estar sin hojas porque sea invierno? ¿O no puede ser un pino? ¿O no puede tener las hojas marrones?...).

Creo que esto no ocurre igual con los niños. Ellos son aún curiosos, vivaces, inquietos, quieren aprender, quieren saber por qué ocurren las cosas… A los tres años, aproximadamente, es la época del “¿Y por qué?”. Es una pena que eso se pierda según vamos creciendo. Cada vez nos importan menos las razones de todo lo que pasa a nuestro alrededor, no nos molestamos en profundizar en nada, nos volvemos tan “cómodos” que nos da igual llegar al fondo de las cosa… Y esto tiene el peligro de llegar a convertirnos en seres meramente superficiales, sin ninguna curiosidad.
Prueba de ello es la respuesta que suele dar un adulto ante el “por qué” de los pequeños… La conversación de pregunta-respuesta-pregunta-respuesta que he comentado antes…suele terminar hacia la tercera o cuarta pregunta con la siguiente respuesta por parte del adulto: “Porque es así y punto”.

Supongo que como futuros profesores de Educación Infantil, más nos valdría recuperar esa curiosidad, para fomentarla en nuestros alumnos, para no tener que recurrir a esa respuesta nunca, para hacer que nuestros alumnos mantengan sus mentes abiertas y sean capaces de darse cuenta de que las “verdades” de nuestro alrededor no son siempre tan verdad, o no son exactamente como las percibimos… Esto que debemos pretender para las futuras generaciones y es lo que persigue el nonsense: romper las ideas establecidas, atreverse a plantear una duda ante una verdad que, hasta ahora, ha sido absoluta…

Entonces… ¿Los animales hablan?

domingo, 17 de abril de 2011

Textos de autor. Teatro y poesía.

En las anteriores entradas nos hemos centrado en la prosa de autor. Para ello hemos hecho un recorrido cronológico hasta los años 90.

Antes de dar unas pinceladas a lo que al teatro y poesía infantil se refiere, hemos de destacar como característica común a ambos, que tienen menos textos escritos que la prosa.

TEATRO INFANTIL DE AUTOR.


En cuanto al teatro infantil de autor hemos de decir que, aunque existe, la recopilación escrita es muy pequeá. Lo más usual a la hora de hacer una representación en el aula con los niños, -o para los niños-, es hacer una adaptación de un cuento.

Los pocos libros de teatro infantil van más bien dirigidos a los maestros, -libros que tratan sobre cómo adaptar un cuento al teatro-, que a los propios niños.

En esta situación, lo que haremos el día de mañana cuando estemos en el aula deberemos tener los recursos necesarios para adaptar cuentos u obras de teatro dirigidas a otro público, a las necesidades, intereses, capacidades y psicología de nuestros alumnos.

POESIA INFANTIL DE AUTOR.

En el caso de la literatura infantil, la producción dirigida al público infantil sigue siendo mucho menos extensa que la producción en prosa, pero sí que supera a la teatral.

En un primer momento, la poesía era utilizada en los colegios como medio de estudiar/aprender otras cosas. Su temática era de lo más variopinta: épica, animales, plantas, el niño y su madre, religión, valores y actitudes, etc... Se utilizaban, sobre todo, las letanías (en el caso de la religión) y las retahílas (como medio para memorizar otras cosas).

Como es de suponer, la "poesía infantil" no respondía a los intereses de los niños sino, más bien, a las necesidades y a las fórmulas de los adultos, ya fuesen padres o profesores.

Esto es así hasta que, poco después de la Guerra Civil, Gloria Fuertes da un giro a su carrera y comienza a centrarse en los niños y a escribir poesías para este colectivo. La razón principal que lleva a esta mujer a escribir poesía infantil, es que opina que la poesía no está lo suficientemente valorada y ve como razón que no hay apenas acercamiento a la misma y... ¿Qué mejor que dirigirse al público infantil para mejorar la acogida de este género?

Gloria Fuertes introduce muchas novedades en lo que a la poesía se refiere. Las principales son los juegos de palabras y el nonsense. Pero, además no podemos olvidar:

a) En cuanto a la forma: la rima fácil y sonora, los juegos de palabras, los ritmos marcados, la brevedad, los juegos fonéticos, las invenciones léxicas, las onomatopeyas, los adjetivos sencillos y evocadores o el simbolismo infantil.

b) En cuanto al fondo: la narración cercana, la concreción y síntesis, el absurdo, los personajes llamativos, la fantasía, las experiencias reales, los niños o animales personificados, el carácter lúdico o los elementos mágicos.

Todo esto, sobre todo la primera parte (la forma), es muy típico del lenguaje infantil en general, y del poético infantil en particular. Si nos fijamos son cosas que utilizan los niños día a día y, es por esto, que sienten esta poesía cercana, divertida y a su alcance.

Como hemos dicho, la figura más representativa, en España, de este tipo de poesía es Gloria Fuertes.

Gloria Fuertes nace en Madrid el 28 de julio de 1917.


De los 2 a los 14 años va a distintos colegios en Madrid.


A los 14 la matricularon en el Instituto de la Educación Profesional de la Mujer. Allí obtuvo los diplomas de Taquigrafía y Mecanografía, Gramática y Literatura y de Higiene y Puericultura.


En el año 34 fallece su madre y ella empieza a trabajar como contable en una fábrica, donde a la vez escribe poemas. En 1935 publicó sus primeros versos y dio sus primeros recitales de poesía en Radio Madrid.


Entre 1938 y 1958 trabaja de secretaria. En el 39 aparece como redactora de la revista infantil "Maravillas", donde publicaba cuentos, historietas y poesía para niños. Esto es así hasta 1953.

Entre 1940-1945 se estrenana obras de teatro infantil y escenificaciones de poemas suyos.

Colabora con la revista femenina "Chicas" donde publica cuentos de humor.


En 1947 obtiene el 1º premio de "Letras para canciones" de Radio Nacional de España.
En 1950: publica "Isla Ignorada", su primer poemario.
En 1951 funda "Versos con faldas", grupo femenino que se dedica durante a hacer lecturas y recitales por cafés y bares de Madrid.
De 1950 a 1954, fundadora y directora de la revista poética "Arquero".
En 1952 estrena su primera obra de teatro en verso "Prometeo" en el Teatro del Instituto de Cultura Hispánica.
En 1954 publica en Lírica Hispana (Caracas) "Antología Poética" y "Poemas del suburbio". Ese mismo año aparece "Aconsejo beber hilo" en la colección Arquero.

Gloria Fuertes organizó, -entre 1955 y 1960-, la primera biblioteca Infantil Ambulante para pequeños pueblos.


Desde 1961 a 1963 reside en los Estados Unidos al obtener una beca para impartir clases de Literatura Española en la universidad.

Ya en España de nuevo, en 1965 obtiene el Premio Guipúzcoa de poesía con "Ni tiro, ni veneno, ni navaja".
En 1966, premio "Lazarillo" con "Cangura para todo".
En 1968: le conceden el Diploma de Honor del Premio Internacional Andersen para Literatura Infantil. Ese mismo año publica "Poeta de guardia".
En 1972 obtiene la Beca March para Literatura Infantil, que le permite dedicarse por entero a la literatura.


A mediados de los 70 colabora activamente en diversos programas infantiles de TVE, siendo "Un globo, dos globos, tres globos" y "La cometa blanca" los que la convierten definitivamente en la poeta de los niños. Recibiendo en cinco ocasiones el Aro de Plata de este medio informativo. A partir de estos años la actividad de Gloria Fuertes es imparable: lecturas, recitales, homenajes... siempre cerca de los niños; publicando continuamente, tanto poesía infantil como de adultos.

Gloria Fuertes fallece en Madrid el 27 de noviembre de 1998.

La obra de Gloria Fuertes es enorme, pero si hay algo que la caracteriza es el absurdo. Es normal que triunfe, sobre todo, en poesía infantil ya que, bajo mi punto de vista, el absurdo muchas veces es lo más lógico, lo no tan absurdo, el preguntarse el por qué de todo y, al fin y al cabo, ¿no es esto lo que hacen los niños?.

Las obras publicadas por Gloria Fuertes y que están dirigidas a los más pequeños son:

Canciones para niños.
Madrid: Escuela Española, 1952.

Villancicos.
Madrid: Magisterio Español,1954.

Pirulí.
Madrid: Escuela Española, 1956.

Cangura para todo.
Barcelona: Lumen, 1968.

Don Pato y Don Pito.
Madrid: Escuela Española, 1970.

Aurora, Brígida y Carlos.
Barcelona: Lumen, 1970.

La pájara pinta.
Madrid: Ed. Alcalá, 1972.

El camello cojito - Auto de los Reyes Magos.
Madrid: Escuela Española, 1978.

El hada acaramelada.
Madrid: Escuela Española, 1973.

La gata chundarata y otros cuentos.
Madrid: Videosistemas, 1974.

El dragón tragón.
Madrid: Escuela Española, 1978.

La Oca loca. Madrid:
Escuela Española, 1978.

La momia tiene catarro.
Madrid: Escuela Española, 1978.

Las tres reinas magas (teatro en verso).
Madrid: Escuela Española, 1979.

Tres tigres con trigo.
Madrid: Yubasta, 1979.

El libro loco. De todo un poco.
Madrid: Escuela Española, 1981.

Así soy yo.
Madrid: Emiliano Escolar, 1980.

Los meses: poemas.
Madrid: Graficer, 1980.

La ardilla y su pandilla.
Madrid: Escuela Española, 1981.

Monto y Lío montan un lío.
Zaragoza: Montolio, 1980.

Monto y Lío se encuentran a su tío.
Zaragoza: Montolio, 1981.

Monto y Lío se meten en el río.
Zaragoza: Montolio, 1981.

El perro que no sabía ladrar.
Madrid: Escuela Española, 1982.

El monte y su aula abierta.
Sevilla: Ed. Monte de Piedad y
Caja de Sevilla. 1982.

Piopio Lope y el pollito miope.
Madrid: Escuela Española, 1981.

Coleta. La poeta.
Barcelona: Miñón, 1982.

El domador mordió al león.
Madrid: Escuela Española, 1982.

Donosito, oso osado.
Madrid: Emiliano Escolar, 1982.



El abecedario de don Hilario.
Barcelona: Miñón, 1983.

Coleta payasa ¿qué pasa?
Barcelona: Miñón, 1983.

Plumilindo. Madrid:
Escuela Española, 1988.

Yo contento, tú contenta,
¡qué bien me sale la cuenta!
Madrid: Escuela Española, 1984.

Coco-loco. Poco-loco.
Madrid: Escuela Española. 1985.

Pelines.
Valladolid: Miñón. 1986.

Calixto, el calamar listo.
Madrid: Ed. Del Ministerio de Agricultura,
Pesca y Alimentación,1986.

El pirata Mofeta y la jirafa coqueta.
Madrid: Escuela Española, 1988.

Doña Pito Piturra.
Madrid: Susaeta, 1987.

Animales Geniales.
Madrid: Escuela Española, 1989.

La noria de Gloria: Lecturas I.
Madrid: Magisterio Español, 1990.

La noria de Gloria: Lecturas II.
Madrid: Magisterio Español, 1990.

Paca, la vaca flaca.
Madrid: Escuela Española, 1990.

La poesía no es un cuento.
Madrid: Bruño, 1990.

Con alegría. Antología.
50 años de poesía.
Madrid: Escuela Española, 1991.

Cuentos de animales.
Madrid: Susaeta, 1992.

La pata mete la pata.
Madrid: Susaeta, 1992.

Chupilandia.
Madrid: Susaeta, 1992.

El mundo encantado de
Gloria Fuertes.
Madrid: Ed. Villa Rica, 1995.

Versos fritos.
Madrid: Susaeta, 1995.

Chupachús.
Madrid: Susaeta, 1995.

La selva en verso.
Madrid: Susaeta, 1995.

Un pulpo en un garaje.
Madrid: Susaeta, 1995.

Las preguntas y
respuestas de Gloria.
Madrid: Susaeta, 1997.



Diccionario Estrafalario.
Madrid: Susaeta, 1997.

Aquí paz y además Gloria.
Madrid: Susaeta, 1997.

Profesiones de ayer y de hoy.
Madrid: Susaeta, 1997.


El cuarto del bebé.
Madrid: SM, 1997.

Cuentos de risa.
El perro Picatoste y otros cuentos.
Madrid: Susaeta, 1997.

Pienso mesa y digo silla.
Madrid: Susaeta, 1997.

¡Qué patas tiene el tiempo!.
Madrid: Susaeta, 1998.

La naturaleza.
Madrid: Susaeta, 1998.

Las adivinanzas de Gloria Fuertes.
Madrid: Susaeta, 1998.

Los buenos salvajes.
Madrid: Susaeta, 1998.

Animalitos amigos.
Madrid: Susaeta, 1998.

Versos de Gloria para jugar
con los más pequeños.
Madrid: Susaeta, 1998.

Versos ingeniosos.
Madrid: Susaeta, 1998.

Trabalenguas para que se trabe tu lengua.
Madrid: Susaeta, 1998.

Tanto amas, tanto vales.
Madrid: Susaeta, 1999.

¿Te atreves? Pues cuenta hasta nueve.
Madrid: Susaeta, 1999.

Genialidades de Gloria sobre los animales.
Madrid: Susaeta, 1999.

Cuentos enanos para
personajes extraordinarios.
Madrid: Susaeta, 1999.

Versos con moraleja.
Madrid: Susaeta, 2000.

Cuentos para 365 días. Antología.
Madrid: Susaeta, 1999.

El gran libro de los animales.
Madrid: Susaeta, 1999.

Gloria Fuertes os cuenta
cuentos de animales.
Madrid: Susaeta, 1999.

Cuentos, cuentos, cuentos.
Madrid: Susaeta, 2000.

¿Qué será, será?
Madrid: Susaeta, 2000.

Poesías, rimas y disparates.
Madrid: Susaeta: 2000.

Lo primero es lo primero.
Lo primero es el Belén.
Madrid: Susaeta, 2000.

Cuentos de humor.
Madrid: Susaeta, 2000.

¡Viva el mundo al revés!
Madrid: Susaeta, 2000.

Poesías para todos los días.
Madrid: Susaeta, 2000.



Acertijos, chistes y canciones.
Madrid: Susaeta, 2000.

Versos para jugar al teatro.
Madrid: Susaeta, 2000.

Vidas chistosas y curiosas.
Madrid: Susaeta, 2000.

Cuentos sorprendentes.
Madrid: Susaeta, 2000.

Un cuento y diez nanas
para leer en la cama.
Madrid: Susaeta, 2000.

365 días con los animales
de Gloria Fuertes.
Madrid: Susaeta, 2001.

Cuentos de risa.
Madrid: Susaeta, 2001.


Ejemplo de poema de Gloria Fuertes. He elegido este poema porque es uno de mis favoritos y me parece muy adecuado para, por ejemplo, hacer la función de Navidad con niños de infantil.


EL CAMELLO COJITO
(AUTO DE LOS REYES MAGOS)

El camello se pinchó
Con un cardo en el camino
Y el mecánico Melchor
Le dio vino.

Baltasar fue a repostar
Más allá del quinto pino....
E intranquilo el gran Melchor
Consultaba su "Longinos".

-¡No llegamos,
no llegamos
y el Santo Parto ha venido!

-son las doce y tres minutos
y tres reyes se han perdido-.

El camello cojeando
Más medio muerto que vivo
Va espeluchando su felpa
Entre los troncos de olivos.

Acercándose a Gaspar,
Melchor le dijo al oído:
-Vaya birria de camello
que en Oriente te han vendido.

A la entrada de Belén
Al camello le dio hipo.
¡Ay, qué tristeza tan grande
con su belfo y en su hipo!

Se iba cayendo la mirra
A lo largo del camino,
Baltasar lleva los cofres,
Melchor empujaba al bicho.

Y a las tantas ya del alba
-ya cantaban pajarillos-
los tres reyes se quedaron
boquiabiertos e indecisos,
oyendo hablar como a un Hombre
a un Niño recién nacido.

-No quiero oro ni incienso
ni esos tesoros tan fríos,
quiero al camello, le quiero.
Le quiero, repitió el Niño.

A pie vuelven los tres reyes
Cabizbajos y afligidos.
Mientras el camello echado
Le hace cosquillas al Niño.

Albumes de imágenes.

Como he comentado en la entrada anterior, es a partir de los 90 cuando se empiezan a crear libros especialmente dedicados a los niños menores de 7 años.

Por una parte aparecen los albumes de imágenes. Estos libros tienen ilustraciones a toda página y se caracterizan por dar la misma importancia al texto y a la imagen. En estos libros, tanto el texto como la imagen tienen como objetivo principal el arte por sí mismo.

Hay quienes piensan que esto es una "tontería" ya que, total, sólo son niños pequeños, que no se dan cuenta y que, por tanto, no tiene sentido elaborar tanto el texto como la imagen. Sin embargo, ¿por qué ellos no tienen derecho a disfrutar de una buena obra de arte?. Además, hay que tener en cuenta que lo que se necesita para escribir un buen cuento infantil no es sólo ser un buen escritor, sino conocer a los niños: lo que les gusta, lo que les preocupa, lo que les interesa, lo que creen, lo que les asusta...

Los álbumes ilustrados no están dirigidos exclusivamente a los niños, también los hay juveniles o para adultos.

Grandes ejemplos de álbumes ilustrados son las obras de Rebecca Dautremer:



domingo, 3 de abril de 2011

Textos de Autor. Prosa.

En el segundo bloque hemos tratado los textos de autor. Como dijimos al principio, los textos de autor son aquellos que tienen un solo autor (toda la obra la escribe el mismo autor), ya sea conocido o desconocido (anónimo). Al ser un libro de un mismo autor, tiene continuidad no sólo en la historia que cuenta, sino también en el estilo (la forma de narrarlo).
Al ser estos textos de un autor concreto, tienen derechos de autor, por lo que no debemos cambiarlos ni de forma ni de estilo, sino mantenerlos tal y como los creo su autor. Además, ¿para qué cambiarlo? Si nuestro objetivo es adaptarlo a los intereses y motivaciones de los niños de nuestra clase, podemos hacer esa adaptación oralmente o, si queremos que lo puedan ver y leer, escribir nuestro propio cuento para los niños (e incluso con ellos).

En nuestro caso, estamos viendo textos de autor de Literatura Infantil, pero hemos de tener en cuenta que ésta no apareció como tal hasta el siglo XX.

Las principales razones por las que no se hacían cuentos para niños era que no sabían leer, así que: ¿para qué escribir para un público que no puede leer? No se pasaba por la cabeza hacer cuentos para que fuesen contados a los niños ya que, para eso, están los cuentos tradicionales…

Vamos a empezar con los textos de autor en PROSA:

En el siglo XVIII, se comienzan a adaptar algunos textos para niños.

Si bien es cierto que no había cuentos para el tramo de Educación Infantil, en el siglo XIX, destacamos a Julio Verne (1828-1905), escritor francés de novelas de aventuras dirigidas a un público juvenil. Es considerado uno de los padres de la ciencia ficción y es el segundo autor más traducido de la historia. Fue condecorado con la Legión de Honor por sus aportaciones al campo de la educación y de la ciencia. Algunas de sus obras más conocidas son: Cinco semanas en globo (1863), Viaje al centro de la Tierra (1864), De la Tierra a la Luna (1865), Los hijos del capitán Grant (1867), Veinte mil leguas de viaje submarino (1869) o La vuelta al mundo en 80 días (1873).

Ya entrando en el siglo XX, hagamos un recorrido general a lo largo del mismo:

Podemos empezar en los años 30 con los conocidos cuentos de Calleja. Saturnino Calleja era dueño de una editorial creada en el siglo XIX y tuvo la idea de fabricar, -al margen de los caros libros ilustrados por famosos dibujantes de la época-, pequeños cuentos de baja calidad y, por tanto, muy económicos, y venderlos en los kioskos. Estos cuentos eran de pequeño tamaño, en un primer momento fueron texos folklóricos, pero posteriormente contrataba escritores para inventar cortos cuyo protagonista era un niño que encarnaba un valor o un contravalor. Todos eran cuentos moralizantes, ambientados en la sociedad de la época, de estructura similar y personajes planos. El que fuesen personajes planos era algo típico del momento, sin embargo, no se daban cuenta de que la mejor forma de atraer que tiene un libro, es que el lector se identifique con algún personaje, con su historia, con sus sentimientos…y esto es prácticamente imposible de conseguir con personajes que carecen de psicología.



Saturnino Calleja realizó dos importantes novedades en el mundo editorial de la época: publicó grandes tiradas de los libros y cuentos (con muy pequeño margen de beneficio, con lo que abarató mucho los precios) e ilustró profusamente todos ellos con dibujos de los mejores artistas, logrando así unos cuentos atractivos y al alcance de los bolsillos de menor poder adquisitivo, acostumbrando a leer, con ello, a varias generaciones de niños.

Después de la Guerra Civil, aparecieron progresivamente distintas editoriales como Molino o Bruguera, que sacaban versiones económicas para las clases más bajas. Para que fuesen económicas, apenas tenían ilustraciones y las pocas que había eran en blanco y negro. Además el papel utilizado era de una calidad bastante mala.

Posteriormente apareció la editorial Araluce, que comenzó a utilizar tapas duras, un papel de mejor calidad e ilustraciones a color, pero esto subía mucho el precio de los libros.

Otro tipo de Literatura Infantil muy típica de estos momentos, era la literatura moralizante y evangelizadora editada por la Iglesia y centrada, sobre todo, en vidas o historias de niños de Santos.

En 1928 apareció una obra que cambió la Literatura Infantil que se había dado hasta entonces, ya que su personaje principal tenía psicología (no era plano): la obra fue Celia y sus amigos, de la autora Elena Fortún, más evolucionada en lo que a Literatura,-por lo menos Infantil-, se refiere.



Esta escritora crea el personaje de Celia, una niña de seis años, rubia, traviesa y de clase media-alta. Celia hacia cosas normales en los niños de su edad, y esto fue crucial para que los niños y, sobre todo las niñas, que leían estos libros se sintieran identificados con ella.

Además, Elena Fortún introdujo otra novedad: Celia fue creciendo, fue evolucionando a través de los sucesivos libros que esta autora escribió. Y, por lo tanto, esa identificación de las lectoras con Celia continuó al ir creciendo, unas y otra, juntas.

Posteriormente, y tras el éxito de Celia, Elena Fortún decidió crear una serie de libros, similar a la de Celia, pero con un protagonista masculino. Para ello creó a Cuchifritín, hermano de Celia, y personaje central de esta serie de libros dirigida a los chicos de la época.



Considero que la innovación que fue Celia para la Literatura Infantil tiene una enorme trascendencia, ya que da respuesta a la necesidad de identificación entre los niños y los personajes de sus libros. Además, parece intencionada esta identificación, ya que después de lanzar Celia, decide crear un personaje masculino para que también ellos puedan tener un “amigo” en la Literatura de la época.

Pasada ya la Guerra Civil (1936-1939), cobró una enorme importancia la radio en lo que a información y entretenimiento se refiere. Y para cubrir el entretenimiento infantil surgen unas series radiofónicas dirigidas a este público. Así, surgen series (y libros) como surgen series (y libros) como Matilde, Perico y Periquín o Antoñita la fantástica.




Tras la innovación que hemos dicho que supuso Celia, otros autores siguen el ejemplo de Elena Fortún, y pretenden acercarse a la realidad del niño. Esto es un paso importante para lograr la tan ansiada identificación niño-personaje. De este modo, dejan de ser personajes planos con 2 o 3 características, todas buenas o todas malas, que les definan. Así es como se acercan a la realidad, a la complejidad de toda persona, incluidos los niños. Tras este primer paso, se crean: Mari Pepa, que se trata de un cómic sobre una niña de Madrid con dos hermanos (más dirigida al público infantil femenino) o El Zorro o El Coyote, más bien dirigidas al público infantil masculino.




Como hemos visto, Elena Fortún y su personaje Celia crearon un precedente. Y un precedente de suma importancia para la Literatura Infantil y, sobre todo, para su público. Para que un libro nos guste resulta imprescindible que haya un reconocimiento. Sin embargo, esto no quiere decir que si no lo hay, si el niño no lee (o le leen) un cuento o ve una película donde no puede decir “ese niño es como yo”, no quiere decir que no le vaya a gustar, puede gustarle por otras cosas: que es divertida, que dicen alguna cosa que le haga gracia, que pueda desear que, por ejemplo, los animales hablen, porque le guste el vestido de la protagonista, porque vea que los personajes son muy guapos y quiera llegar a ser como ellos, etc… Pero esto no implica un reconocimiento, sino un deseo de llegar a ser. Así que, sin ninguna duda, preferirán aquel en el que aparezca un niño similar a ellos, que haga cosas normales con su familia, sus amigos, sus profes, sus compañeros…que hable, piense o sienta como ellos, que tenga amigos como los suyos… En definitiva, esta es la fórmula para el éxito en la literatura.

Dando un salto hasta casi los años 70, veremos aparecer las tarjetas de cuentos, cuyo fin era fomentar la lectura infantil.



Por último, a partir de los 90 se dedicó una gran atención a la Literatura Infantil. Se puede considerar a esta década como el “Boom de la Literatura Infantil”. El primer personaje dirigido a los niños es Babar, creado por el autor francés Jean de Brunhoff. Lo creó en los años 30, al final de su vida. Su hijo continuó con su obra a partir de 1946 y reeditó la serie de su padre para exportarla a todo el mundo.